44 – Massive Attack en Barcelona: Ataque masivo a la conciencia

 

Massive Attack
Massive Attack en Sant Jordi Club, Barcelona, 16/02/2019

Saturday Night 21:00h

El Sant Jordi Club está ubicado en el complejo construido para las olimpiadas celebradas en el año 1992, detrás del Palau Sant Jordi y junto al Estadi Olímpic Lluís Companys. Todo el conjunto queda en Montjuïc, una pequeña montaña dentro de Barcelona. Esta zona tiene medios de transporte limitados por la noche. Los que tenemos cuarenta larguísimos, nos podemos permitir ir a un concierto en nuestro coche y estacionar al lado de la entrada. Es verdad que llegué una hora antes, pero estaba tan asombrado por la facilidad con la que aparqué que hasta le pregunté a un guardia de seguridad si se podía dejar el coche allí.

En los exteriores, lo de siempre, venta ilegal de cervezas y mi primera sorpresa, esa que nos recuerda que el tiempo pasa para uno también ¡la gente tenía mi edad! bueno, algunos más, creo, y otros pocos, menos.

Interior Sant Jordi Club
Interior Sant Jordi Club

El Sant Jordi Club es un espacio amplio, con el techo alto, gradas en uno de los lados, varios puestos de cerveza, un lugar donde vendían frankfurts, un patio interior al aire libre que alberga un local de comida rápida (y también vendían cerveza, claro) y muchísimas salidas. Por descontado, no podía faltar un puesto de merchandising de la banda.

El escenario estaba oscuro y hacían pruebas de sonido. Algunos ya se habían ubicado cerca. Yo di unas vueltas, me tomé una cervecita, observé a la gente, estudié la situación y busqué una buena ubicación a la derecha y cerca del escenario, donde me parapeté veinte minutos antes de la hora programada para que comience el show. Con mi metro sesenta, podía ver gran parte del escenario entre las cabezas.

Puntualidad inglesa

La dinámica de un concierto donde hay mucha gente frente a un escenario esperando a que salgan sus ídolos, es la que es. Las cabezas que tenía delante se multiplicaron… me encanta la gente que hace avanzadillas: viene una persona, una chica con acento extranjero en este caso, levanta su lata de cerveza a modo de estandarte y aparecen tres o cuatro personas (cabezas) más. Una parejita, que al parecer había escogido ese evento como primera cita, les pidió amablemente que se movieran un poco hacia atrás… ¿y quién estaba detrás…? adivinen.

Los minutos pasaban de la hora programada y considerando que se nos había comunicado que el concierto se adelantaba media hora, algunas personas comenzaron a impacientarse. Hay gente que no sabe disfrutar del momento…

Massive Attack (y otras cosas)

Vista entre las cabezas
Vista entre las cabezas

Pasados unos veinte minutos de las nueve, comienza el concierto. Ni un buenas noches, al grano. Si los que leen esta crónica esperan un análisis profundo del concierto y la banda, con sus influencias y cronología, pueden buscarlo en publicaciones especializadas. Pondré algunas referencias al final. Yo, aunque conocía a Massive Attack desde los noventa, me introduje en su mundo hace relativamente poco y quedé tan impresionado por ellos que no me podía perder esta cita.

Lo primero y más destacable era esa gran pantalla en tríptico y translúcida que había detrás y a los costados del escenario. Allí proyectaron toda clase de mensajes interpelándonos, desde imágenes bucólicas hasta otras reales de guerras recientes y sus consecuencias. Vimos a los líderes que toman y tomaron las decisiones de este mundo en los últimos treinta años. También a famosos. Se tomaron el trabajo de traducir los textos al catalán, algo que me pareció respetuoso respecto al lugar en el que se encontraban. Los mensajes cuestionaban, entre otros temas, nuestro status quo en la sociedad de la información, los algoritmos que escarban entre nuestros datos, en referencia a las redes sociales y la información que compartimos en internet. También versaban sobre los eslóganes que han regido y condicionado nuestras vidas a lo largo de la historia hasta nuestros días. Y muchas cosas más que seguramente me habré perdido. El visual era un espectáculo dentro del sonoro y complementario a este. Recordemos que Mezzanine ya contenía canciones con videos potentes.

Pantallas
Tres pantallas proyectando imágenes

El sonido era alto y bestial. Sabemos que es una de las obsesiones de esta banda. Esas dos guitarras en las canciones más roqueras parecían no tener límite, en especial en piezas con contrastes musicales como Dissolved Girl, Angel o la que ejecutaron para cerrar el concierto Group Four.

Un tema aparte fueron los covers. En un momento del concierto entró 10:15 Saturday Night de The Cure y yo no me lo podía creer. Poco después Bela Lugosi’s Dead de Bauhaus. Mi improvisada compañera (la de la cerveza) estaba extasiada en estos momentos reclamando a viva voz un porro a sus amigos y amigas. Hubo más homenajes a sus influencias según las crónicas especializadas, pero yo, aun sabiendo que no eran temas de los de Bristol, desconocía a los artistas originales.

Otra de las razones por las que fui al concierto se llama Elizabeth Fraser. Yo escuchaba a Cocteau Twins, y tuve la oportunidad de verlos en un teatro de la calle Corrientes de Buenos Aires, si no me equivoco, a principios de los noventa (alguna web dice que tocaron en abril de 1991). Cuando descubrí que Fraser se había unido al proyecto Massive Attack, justamente para el álbum Mezzanine, todas las sinapsis de mi cerebro se confabularon para investigar qué había hecho esta artista escocesa dotada de una voz privilegiada, y les puedo asegurar que no ha parado desde el año 1981. En este concierto, cada vez que apareció, se la celebró con respeto y aprecio. Teardrop es con seguridad la canción más icónica de la colaboración de Fraser con Massive Attack y de no haber sido por quienes se saben la letra y no dejan escuchar el concierto, hubiera disfrutado más de sus registros vocales líricos, uno de los momentos más íntimos del show que puede verse en este video de isafromnowon:

También es de destacar otro de los invitados Horace Andy, el veterano cantante jamaicano de Reggae, que interpretó varias canciones, entre estas Angel. Aquí el video de isafromnowon:

Después del ataque

Se ha de decir que no son muy comunicativos e interactivos con el público, si consideramos que todo el show audiovisual está pensado para que el mensaje cargado y complejo sea unidireccional. Solo creí apreciar un gesto de agradecimiento en el rostro de Liz Fraser al acabar de cantar una hora y cuarenta y cinco minutos después de comenzar el show. Entonces, se apagaron las luces y la iluminación del recinto se encendió ante los rostros perplejos de los asistentes, que tampoco demostramos un entusiasmo desmedido. Segundos después ya estaban desmontando el escenario y las puertas laterales estaban abiertas invitándonos a salir.

Yo, desde mi agnosticismo, no pude más que blasfemar para mi interior “¡Madre de Dios, qué acaba de pasar aquí!”. El concierto me había parecido alucinante. La gente abandonaba lenta y ordenadamente el recinto, ajena a los 8 grados que hacían en el exterior. Lo único que me quedaba por hacer era una última foto.

Salida del concierto
Final del concierto

Al costado del recinto, esperaba el cohete que trasladaría a estos extraterrestres a Madrid para hacer otro concierto similar al día siguiente, para luego, continuar viaje con todos los que les quedan en Europa y América del Norte hasta principios de abril. Cuando acaben, deduzco, volverán a su planeta.

Christian Flavio Tasso

 

 

Nota: todas las fotos que aparecen aquí son mías. Pueden usarlas referenciándome. Gracias. Los videos de youtube pertenecen a isafromnowon. Gracias.  (disponibles a febrero 2019).

 

Información adicional y fuentes consultadas

massiveattack.co.uk. (febrero 2019) Mezzanine XXI – Massive Attack. Disponible en: <https://www.massiveattack.co.uk/>

elperiodico.com. (febrero 2019). Massive Attack, magia y apocalipsis en el Sant Jordi Club, Jordi Bianciotto, 17/02/2019. Disponible en: <https://www.elperiodico.com/es/ocio-y-cultura/20190217/critica-massive-attack-sant-jordi-club-7308901>

altafidelidad.org. (febrero 2019). Instantáneas: Massive Attack (Barcelona, 16/02/19),  Santi Hurtado, 17/2/2019. Disponible en: <http://www.altafidelidad.org/instantaneas-massive-attack-barcelona-16-02-19/>

okdiario.com. (febrero 2019). Massive Attack salda su deuda con Madrid en una noche dedicada a su historia, 18/02/2019. Disponible en: <https://okdiario.com/cultura/musica/2019/02/18/massive-attack-salda-deuda-madrid-noche-dedicada-historia-3718190>

elizabethfraser.com. (febrero 2019). Elizabeth Fraser – Official Website. Disponible en: <http://elizabethfraser.com/>

cocteautwins.com. (febrero 2019). Cocteau Twins – Official Website. Disponible en: <http://cocteautwins.com/>

wikipedia.org. (febrero 2019). Horace Andy. Disponible en: <https://es.wikipedia.org/wiki/Horace_Andy>

wikipedia.org. (febrero 2019). The Cure. Disponible en: <https://es.wikipedia.org/wiki/The_Cure>

wikipedia.org. (febrero 2019). Bauhaus (banda). Disponible en: <https://es.wikipedia.org/wiki/Bauhaus_(banda)>

twinsdecocteau.blogspot.com (febrero 2019). Cocteau Twins performances. Disponible en: <http://twinsdecocteau.blogspot.com/p/cocteau-twins-performances-wikipedia.html>

Blog 21- Algunos sueños son posibles o The Stone Roses en Barcelona

La verdad es que he escrito un blog, aún no publicado, en el que vuelvo a reflexionar sobre los valores del mundo y la sociedad en la que vivimos… Pero por el momento se van a salvar de leerlo, ya que tengo cosas más alegres sobre las que escribir: los sueños cumplidos.

¿Qué es la felicidad?

Hace alrededor de 20 años (y digo «alrededor» porque el tiempo se pliega en nuestras memorias de una manera curiosa con el paso de los años), llegó a mis oídos una canción que se convirtió de forma instantánea, en una de esas que conformarían la banda sonora de mi vida. Comenzaba como una canción «normal», en el sentido que no tenía nada destacable con respecto a otras similares que escuchaba por aquel entonces, pero de golpe, en el minuto 3:38 estallaba de una manera desmesurada en acordes de guitarra, casi sobrenaturales, acompañados de un bajo y una batería de ejecución excelsa y acababa en el minuto 8:14 dejándome con una sensación de éxtasis catártico. El tema era «I Am The Resurrection» de The Stone Roses… Y yo llevo 20 años resucitando cada vez que lo escucho (ya hablé de esta canción en otro de mis blogs).

Me compré los dos CD que publicó este grupo en los 90, aunque, salvo que era una banda de Manchester, no sabía demasiado de ellos. De hecho soy de los que se deja llevar por variadísimas propuestas musicales sin prestar, a veces, demasiada importancia a los nombres de las canciones o a las letras.

Pocos años atrás, ya en la era del Youtube, el Wikipedia y el Facebook, investigué un poco sobre estos señores, y vi que se habían disuelto hacía más de 10 años y que estaba considerada una banda de culto, padres de lo que algunos llaman «La movida de Manchester» o «Madchester» y que habían influenciado toda la música de los 90, incluyendo a bandas consagradas como Oasis. Busqué aquel riff de guitarra en Youtube y era imitado, desvirtuado y ejecutado por varios admiradores, y yo pensaba «Algún día me gustaría aprender a tocar la guitarra sólo por el hecho de poder ejecutar esta parte de la canción».

Hace un par de meses, como soy fan de la banda en Facebook (o de alguna página similar), veo un anuncio que dice que tocarían en breve en Barcelona. Se había vuelto a juntar la formación original para hacer una gira que empezaba en esta ciudad. Comienzo a soñar, tenía la posibilidad de resucitar viéndolos en directo…

Sueños en directo

Mi pareja, que suele darme sorpresas de este tipo, me regaló la entrada ¡Gracias amor! Los tenía a un par de meses de distancia ¡Y no es que sea un apasionado de los directos! Pero esto era algo histórico que no me iba perder.

The Stone Roses BCN 8jun12

El día llegó. Fue el pasado viernes 8 de junio. El lugar era la Sala Razzmatazz, una disco que queda en los vestigios de lo que fue una zona industrial dentro de la Ciudad de Barcelona, en el barrio de Poble Nou.

Estaba nublado, y por momentos llovía, aunque la humedad y el calor daban la sensación de agobio. Es lo que tienen las ciudades que quedan cerca del mar…

Había mucha gente en los alrededores de Razzmatazz, gran cantidad de británicos, y muchos más aún en el interior del recinto. Las personas se agrupaban en la entrada para comprar camisetas de la banda. En las barras, los vasos de cerveza se llenaban con tal facilidad que parecía que el local estaba situado sobre un manantial natural de este líquido. La media de edad era «media alta». Yo estaba en Barcelona, pero se hablaba otro idioma. Si existieran los teletransportadores o las máquinas del tiempo, podría decir que me encontraba en alguna de las naves industriales del Manchester de finales de los 70 u 80… Al menos según mi imaginación, ya que no conozco Manchester.

Tengo que admitir que, cervecita en mano, me tomé una media hora en estudiar cuál era la posición adecuada para poder disfrutar del espectáculo considerando una variable importante: mi limitada altura en comparación con esta gente del norte (…¡ y con el resto de la humanidad!). Decidí ponerme en el centro, cerca, pero no veía nada y ya había perdido unos cinco kilos con el calor que hacía. Entonces me acerqué a la mesa de sonido, mientras iba tomado algunas fotos y videos con el móvil. Ya eran casi las 21:30. Iban con media hora de retraso, aunque el ambiente en el interior era bastante festivo. Es que los británicos son festivos. Baste para confirmar que en 5 minutos, ya me había hecho de un par de amigos eventuales.

Al sonar las primeras notas de música, el público estalló, se descontrolaron y comenzaron a corear sus letras. Eran nuestros ídolos y después de más de 15 años habían vuelto y estaban allá arriba, en aquel escenario, a pocos metros de distancia.

No me extenderé en crónicas y análisis sobre las canciones, versiones, forma y cantidad ya que los expertos se encargarán de hacer sus reflexiones (ver links de más abajo). Lo que sí expresaré a nivel personal, es que me parecieron impresionantes desde el punto de vista musical, y que si sólo te quedas con sus discos, te estás perdiendo el poder que tiene la banda al tocar en directo. Luego de cambiar dos veces más mi posición hasta encontrar un lugar desde el que veía todo el escenario, podía saltar y, además, estaba bajo un chorro de aire acondicionado, y una hora y media de concierto después, llegó, según los expertos, un inusual bis con el momento de La Resurrección. La ejecución en directo fue perfecta para mí y extendida para deleite de los que estábamos allí. Yo quería más, pero ya se había acabado.

Había resucitado nuevamente.

Christian Flavio Tasso

Otras referencias:

http://www.thestoneroses.org/

http://www.youtube.com/user/STONEROSES2012?feature=watch

http://www.abc.es/agencias/noticia.asp?noticia=1186655

http://jenesaispop.com/2012/06/09/the-stone-roses-arrasan-barcelona-en-el-inicio-de-su-gira/

http://cultura.elpais.com/cultura/2012/06/09/tentaciones/1339200538_397739.html

http://www.musicazul.com/conciertos/the-stone-roses-razzmatazz-barcelona-08-06-2012/